miércoles, 24 de octubre de 2012

Un asiento de anea  acabado de terminar. La anea es muy agradable de trabajar, el olor y la suavidad la hace muy atractiva. Te remonta a esos olores de antaño cuando se recorría el pueblo o las casas de campo. Yo le tengo mucho cariño porque fué lo último que me enseñó mi padre. Espero que os guste
Saludos

No hay comentarios:

Publicar un comentario